Querido
diario (8):
Hoy
vuelvo a sentir que todas las personas que me rodean son idiotas. De nuevo he
estado toda la tarde en el Starbucks del aeropuerto, escuchando mi vinilo de No
Sé Qué Grupo Indie Que No Conoce Ni Su Puta Madre mientras me veía obligado a
quejarme de lo mainstream que resulta este mundo vía twitter con mi Mac Book
Pro i5 13’’. ¿Por qué la vida es tan difícil? ¿Qué he hecho yo para merecer
esto? Encima, me han puesto el frapuccino sin caramelo… Soy un incomprendido.
La gente me mira raro por ser diferente. Qué digo diferente… ÚNICO. Pero no lo hago a posta. La sociedad
me obliga a llevar gafas de pasta y pantalones ajustados (arremangados por
encima de los tobillos y con mocasines y calcetines de rombos, obviamente)
para demostrar que otro mundo mejor es posible.

Ains,
diario…cuánto echo de menos los 50’s y los 60’s. Las Polaroid, el pop, los
flequillos, las RayBan originales, el sepia, los vinilos, el romanticismo, los
besos bajo la lluvia, las películas de Buñuel, (que solo he visto una, pero es
mi Director preferido)... Qué tiempos aquellos… [GOOD TIMES].
En fin.
Qué le voy a hacer si soy una rareza natural. Mañana seguiré luchando contra
todas las injusticias de este mundo. Twittearé todo lo que pueda desde mi Mac y
mi iPhone, leeré las portadas de varios libros de filosofía y escribiré más
canciones sin sentido, pero que tienen que ser buenas (por cojones), ya que no
las entiende ni Dios.
Nos
vemos pasado mañana, diario (escribir en el diario todos los días es muy
mainstream).
1 comentario:
Querido diario:
Esta noche como todas las noches he hecho balance de los últimos acontecimientos que han salpicado mi vida en mayor o menor medida y he llegado a la conclusión de que tengo que echarle más sal al entrecot de ternera y al puré de verduras.
En realidad esa no era la conclusión pero quiero dejar constancia para que cuando vuelva a leer este escrito dentro de algunos años y siga desayunando , almorzando, merendando y cenando comidas sosas, saber que tenía intención y deseo de añadir más sal.
A la única y verdaderísima deducción que he llegado ha sido que me estoy asfixiando. Mi entorno es cada vez más mentalmente retrasado, y lo que hay fuera de mi círculo de visión ha perdido los valores, principios y está a medio escalón de perder la dignidad.
Eso sin contar que el país se va a la mierda y aún no he pensado seriamente el lugar al que me gustaría emigrar. Cosa que me frustra, puesto que con lo inteligente, guapa y extrovertida que soy debería de tener ya en mi cabeza un plan b, c y d por si la cosa se tuerce. Y no lo tengo.
Pero todo esto es lo de menos. Lo más importante y que me ha impulsado a escribir esta noche ha sido que hoy por la mañana, mi madre me ha dicho que le grabe un cd de Antonio Orozco. ¡¡¡¡ ANTONIO OROZCO!!!!, ese que hace no sé qué mierda pastelosa y cutre y que adora todo el público enlatado de Gran Hermano, Sálvame y La Noria, que es el mismo siempre; y que seguramente lo tendrán comprado con bocadillos y zumos de piña. ¿ PERO QUÉ PUTASHOSTIASMIERDAIJDFHDBUAHSDJSDJDSJSFNDBDJSK DE MÚSICA ES ESA? Si pudiera le daría unas cuantas hostias, pero en plan “¡zas! Con cariño”, que es mi madre.
En fin, indignación. Indignación es lo que siento y ganas de pegar puñetazos a gente aleatoria de la calle para que espabile.
Gracias por escuchar un día más mis absurdeces de locadescerebradainternaenpsiquiátrico y que sólo los pocos como yo comparten.
Besis a mí misma.
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